
Incluyo la sentida crítica de Miguel Sanchez Flores en www.otrastardes.com de este fabuloso album:
"Escuchar a Johnny Cash es casi un acto terapéutico y sus canciones, un acto de fe. Este es el disco perfecto para detenerte en el mundo, boca arriba, y repensar un poco tu existencia.
Y no se trata de discurso religioso barato, ni de letras aleccionadoras que te dicen lo que debes hacer. Para nada. Lo que hace Cash con su voz y guitarra no tiene referente. Mejor dicho: lo que hizo a lo largo de su vida no tiene referente y uno no puede más que respetarlo y quererlo, por tranquilizar las cosas cuando piensas que todo va mal, por un grupo de canciones que no dudaría en llevarme de este mundo para seguirlas escuchando por siempre.
Bajo la apariencia engañosa de un disco de covers este disco se nos presenta como lo último que grabó en vida. En American IV: The Man Comes Around, Cash convierte canciones que todos creían de Nine Inch Nails, Simon and Garfunkel o de los Beatles en suyas. Y todo el drama y la esperanza suenan distintas en su voz.
Nadie como él para exorcizar sus propios demonios, para jugársela todo con su música.
Y supo sobrevivir a aquellos tiempos de anfetaminas y de inicios del rock. Supo hacer respetar su propuesta musical, su propio registro y su manera de decir las cosas cuando todo el mundo hacía cosas distintas.
A tal punto que llegó a vivir en este siglo junto a su esposa, la también cantante June Carter. Estoy seguro que los últimos años de Cash fueron los mejores de su vida y que lo mejor que le pudo pasar es morir solo 4 meses después de June."
A la saca!
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